¿Qué puede haber mejor que el sonido de unas patitas correteando ansiosas por el suelo? Un cachorro es algo maravilloso, y le esperan momentos emocionantes con su fiel compañero. Por supuesto, habrás llevado a tu nuevo miembro de la familia en el corazón y querrás que crezca sano y lleno de vida. Pero ¿qué hacer si tu cachorro tiene diarrea de repente? Aunque no siempre son motivo de preocupación, unas heces poco espesas pueden ser indicio de una enfermedad grave. La diarrea en los cachorros no es algo que deba tomarse a la ligera. En este artículo, no solo te mostraremos algunas posibles causas de la diarrea de tu cachorro, sino que también te aconsejaremos sobre qué hacer en caso de emergencia.
Determinar la causa: ¿por qué mi cachorro tiene diarrea?
La causa más frecuente de diarrea en los cachorros es que su sistema digestivo esté desequilibrado por algún motivo. Por lo tanto, en la mayoría de los casos, las heces poco espesas se deben a que un perro joven ha comido algo inadecuado. Los cachorros son muy curiosos y les gusta investigar las cosas. Por eso muerden todo tipo de objetos. Esto puede provocar que llegue algo sus estómagos, lo que acaba alterando su digestión. El organismo del perro puede recurrir a la diarrea y los vómitos para intentar deshacerse del cuerpo extraño.
Tu cachorro no debe comer las siguientes cosas:
- Alimentos estropeados
- Comida húmeda demasiado fría
- Sobras o restos de la mesa
- Alimentos para humanos
- Demasiado pienso
- Alimentos extremadamente grasos
- Huesos
- Espinas de pescado
- Nieve
- Agua potable sucia
Si tu perro aún no ha aprendido lo que puede comer y lo que no, es probable que al principio lo considere casi todo comestible. Esto puede llevar a que tu pequeña mascota coma sobras o comida en mal estado que no es buena para ella y que, a la larga, puede provocarle diarrea.
Mientras tu cachorro no ingiera nada venenoso o con bordes afilados, debería tratarse de un trastorno gastrointestinal inofensivo. La situación es distinta si tu perro ingiere accidentalmente alimentos nocivos para él (por ejemplo, chocolate, medicamentos, productos de limpieza o cebos tóxicos). En cuanto lo notes, debes llevar a tu mascota al veterinario inmediatamente, ya que su vida corre un grave peligro.
Lista de control: Posibles síntomas asociados y causas de la diarrea
| Causa | Descripción | Síntomas |
|---|---|---|
| Parásitos (por ejemplo, tenias, neamotodos, lombrices intestinales) | La transmisión se produce al olfatear heces de perros extraños o zonas de hierba o plantas donde se encuentran huevos o larvas de gusanos. La transmisión también puede producirse por la ingestión de ratones. Estos parásitos se detectan mediante una muestra de heces. El problema se resuelve entonces con un tratamiento adecuado. | Los síntomas incluyen debilidad y fatiga, tenesmo debido al picor, irritación de la piel y eczema, pérdida de peso, sangre en la diarrea, vómitos y, normalmente, estómago hinchado en los cachorros. |
| Giardia | Estos parásitos microscópicamente pequeños son muy contagiosos y perturban enormemente la digestión. No pueden tratarse con un desparasitante normal. | La giardia se manifiesta en forma de diarrea blanda y viscosa, a menudo de color amarillento. Suele poner muy enfermos a los perros jóvenes y requiere un tratamiento intensivo. Los perros adultos lo soportan mejor y se mantienen en forma, pero su peso disminuye de forma constante. |
| Estrés | Muchas impresiones y experiencias nuevas pueden abrumar a los cachorros. Los perros sensibles son especialmente susceptibles. | El estrés puede expresarse tanto positivamente (por ejemplo, a través de una alegría excesiva) como negativamente (por ejemplo, a través de un nerviosismo/ansiedad infundados). |
| Medicamentos | Los medicamentos para perros pueden tener efectos secundarios, que a menudo incluyen diarrea y vómitos (por ejemplo, comprimidos antiparasitarios). | Un tratamiento desparasitante puede provocar diarrea y vómitos en los cachorros, ya que el preparado combate la infestación. Los gusanos mueren y el organismo intenta deshacerse de ellos lo antes posible. Los síntomas solo deberían ser temporales. |
| Infección gastrointestinal | Virus, bacterias y hongos pueden instalarse en el aparato digestivo de un cachorro. El sistema inmunitario del perro seguirá siendo débil, por lo que pueden producirse infecciones. | Además de la diarrea, otros síntomas de una infección son la necesidad de dormir y los vómitos. |
| Enfermedades graves como inflamación del páncreas, cáncer o enfermedad hepática. | Si los órganos digestivos están enfermos, se produce diarrea tanto en perros adultos como en cachorros. Otras enfermedades también pueden afectar al aparato digestivo porque afectan a todo el organismo. | Normalmente, se observan cambios de comportamiento, como nerviosismo, inquietud, desvanecimiento o somnolencia. Además, algunas enfermedades provocan vómitos y/o sangre en las heces ("diarrea negra"). En caso de colitis, aparece mucosidad en las heces. |
¿Es hora de ir al veterinario? Cuándo solicitar asistencia médica
Si tu cachorro tiene diarrea, no es necesario que acudas inmediatamente al veterinario. Se debe prestar siempre atención al estado general del perro. Si tu mascota parece cansada y débil, acude directamente al veterinario. Si tu cachorro parece en forma y feliz, en muchos casos puedes controlar tú mismo los síntomas con la ayuda de un periodo de ayuno o una dieta ligera. Sin embargo, si tu cachorro sigue defecando durante varios días, debes llevarlo a una consulta o clínica veterinaria para determinar la causa. Si es posible, debes llevar una muestra de heces para ayudar a identificar el desencadenante. La diarrea de tu cachorro no tiene por qué tener una causa grave. No obstante, también se recomienda visitar al veterinario, ya que el organismo de un perro joven no estará ingiriendo ningún nutriente si todo se excreta con demasiada rapidez. Tu cachorro también perderá mucha agua (debido a las heces poco espesas) y correrá el riesgo de deshidratarse. Esta enfermedad puede poner en peligro la vida de los perros jóvenes.
Cómo están vinculadas la dieta y la diarrea en los cachorros
Si tu cachorro tiene diarrea, su alimentación también puede influir, ya que su sistema digestivo será relativamente sensible. Si alimentas a tu cachorro con demasiada variedad, puedes irritar su sistema gastrointestinal. Por este motivo, siempre se debe cambiar el pienso de forma gradual y no repentina. Un cambio rápido de pienso también puede provocar estreñimiento, flatulencias o falta de apetito en los perros. Nuestra recomendación: dejar pasar al menos una semana para pasar a un nuevo alimento para perros, cambiando la variedad de pienso gradualmente. En los primeros días, sustituye aproximadamente una cuarta parte del pienso anterior por el nuevo. Aumenta la proporción en los días siguientes hasta que la comida consista totalmente en el nuevo pienso. Si tu perro es muy sensible y tiene dificultades con esto, prolonga la fase de cambio. Al principio, añade solo una cantidad muy pequeña al pienso habitual y aumenta la cantidad muy lentamente. Hacer clic aquí para obtener más información sobre cómo cambiar el pienso del perro.
Cambia el pienso de tu perro paso a paso.
Es importante cambiar el pienso gradualmente, sobre todo si se quiere pasar de comida húmeda a seca o viceversa. La razón es obvia: el organismo de un cachorro necesita tiempo para adaptarse a una dieta completamente distinta.
¿Es tu pienso actual poco adecuado para tu perro joven?
En los perros también pueden aparecer sensibilidades nutricionales, como intolerancias y alergias. Pueden provocar diarrea, infecciones de oído o erupciones cutáneas en los cachorros. Una medida para las sensibilidades nutricionales puede ser utilizar un alimento hipoalergénico para perros. Como norma general, debes consultar a un veterinario si tu cachorro tiene diarrea durante un largo periodo de tiempo. Si resulta que tu mascota no tolera determinados ingredientes o es alérgica a ellos, puedes elegir un pienso para perros adecuado
También puede producirse diarrea si el cachorro come lo siguiente:
- Aimentos descompuestos que se han dejado demasiado tiempo al calor, por ejemplo.
- Comida húmeda o carne cruda del frigorífico aún demasiado fría.
- Restos o sobras de la mesa
- Alimentos humanos (algunos de los cuales pueden ser incluso venenosos y poner en peligro la vida, como el chocolate, las uvas y las pasas sultanas).
- Cantidad excesiva de comida
- Nieve
- Agua potable sucia, por ejemplo, de un charco
- Alimentos extremadamente grasos
- Espinas de pescado
- Huesos
¿Qué puedes hacer?
- Si tu perro aún está en forma, puedes saltarte una o dos comidas. A diferencia de un perro adulto sano, un cachorro no debe someterse a un periodo de ayuno de 24 horas.
- Asegúrate de que tu cachorro beba mucha agua para evitar la deshidratación.
- Una alternativa al agua es el té diluido (por ejemplo, manzanilla), que también puede tener un efecto positivo en la digestión.
- Después de un día de alimentación reducida, alimenta a tu cachorro con una dieta suave por el momento. Lo mejor es el arroz o las patatas. También puedes darle plátanos maduros en pequeñas cantidades, ya que aportan mucha energía y además pueden tener un efecto regulador de la digestión. También contienen pectina, que puede ligar cualquier toxina en los intestinos.
- El cachorro debe recibir esta dieta suave durante al menos 3 días para evitar cualquier otra alteración del sistema digestivo debida a un cambio de dieta demasiado rápido.
- Dale a tu pequeño amigo pequeñas porciones al principio para comprobar la tolerancia.
- En general, debes observar atentamente a tu cachorro cuando tenga diarrea. Esto te ayudará a reconocer mucho más rápidamente los cambios en su comportamiento, que podrían ser indicios de enfermedad (por ejemplo, agotamiento).
- Investiga un poco: si tienes alguna idea sobre los posibles desencadenantes del trastorno digestivo de tu perro, podrás decidir más rápidamente si es necesario acudir al veterinario (por ejemplo, unos zapatos perdidos, madera masticada o un incidente durante el paseo).
Conclusión
También puedes tomar medidas para prevenir la diarrea en tu cachorro. Ante todo, es importante que prestes mucha atención a lo que come. En este contexto, debes enseñar a tu cachorro a tomar comida solo cuando se lo permitas. Esto también es una medida importante para proteger a tu mascota de señuelos y otros peligros. Tu pequeño amigo de cuatro patas debe aprender y dominar la orden "fuera". También es aconsejable comprobar quién, aparte de ti, puede darle de comer a tu cachorro: amigos y familiares con buenas intenciones pueden darle a tu mascota algo inadecuado.
Denise Avellan
Autor de la guía
"Rodeado por el fresco viento del norte, el tormentoso mar Báltico y perros dormidos, vivo, blogueo y escribo en la ciudad hanseática de Rostock. Desde pequeña, siempre me han acompañado y fascinado los perros y gatos, por lo que me he especializado profesionalmente en el sector canino y de los animales de compañía. Como copywriter sobre perros, lleno de vida los sitios web, blogs y cuentas de redes sociales de empresas dedicadas a los animales. Actualmente soy una dueña orgullosa de dos perros machos, con los que me gusta pasear por la naturaleza del norte de Alemania".